Creo profundamente que en cada ser habita una fuerza sabia y amorosa, capaz de restaurar el equilibrio cuando todo parece tambalear.
Mi labor como terapeuta ayurvédica y acompañante en salud femenina nace de esa certeza: la de que sanar es un regreso a lo esencial, a lo que ya somos.
Desde el Ayurveda te ofrezco un acompañamiento integral: masajes, tratamientos, orientación nutricional, rituales cotidianos, ejercicios suaves y técnicas de relajación.
Cada encuentro es una invitación a reconectar con tu ritmo, tu cuerpo, tu energía sutil. A que vuelvas a sentirte en casa en tu propia piel.
Mi Trayectoria en Ayurveda y Salud Femenina
Nací en Colombia, una tierra donde los saberes antiguos aún viven en el murmullo de las hojas, en los cantos del fuego, en los gestos cotidianos de las mujeres. Crecí junto al mar Caribe, donde las aguas saladas expanden el alma y los ríos de aguas dulces abrazan la tierra como arterias vivas. En esa abundancia de colores, sabores y aromas, aprendí a sentir la naturaleza como parte de mí.
Desde pequeña, mi madre me abrió las puertas a lo invisible: me enseñó a mirar con los sentidos despiertos, a confiar en los remedios del jardín, a respetar los ritmos de la luna y los silencios del cuerpo. Sin nombrarlo, me llevó al corazón de lo sagrado. Esta afinidad se convirtió en una constante en mi vida, guiándome en la búsqueda incesante de comprensión y paz interior.
Años después, conocí a Lakshmi, una mujer sabia de Nepal que fue mi primera maestra en Ayurveda y Yoga. Con ella aprendí que el cuerpo es un templo, que la respiración es una ofrenda y que la verdadera transformación ocurre en lo profundo. Ella no sólo encendió mi inspiración: fue quien sembró en mí las primeras semillas de este camino.
Mi formación profesional comenzó en Alemania, con estudios en Marma-Terapia y Masaje Abhyanga. Más adelante, seguí el llamado hacia la India, cuna del Ayurveda, donde me formé de manera intensiva como Terapeuta en Panchakarma y Masaje Ayurvédico tradicional en el hospital PVA de Kannur, Kerala, bajo la guía del Dr. Irfan Poilan. Allí, aprendí no solo técnicas profundamente transformadoras, sino también a sostener el espacio terapéutico desde la humildad, la escucha y la devoción. Fue una experiencia iniciática que consolidó mi entrega a esta medicina milenaria.
A lo largo de los años, he seguido nutriendo mi camino con maestras y maestros de distintas tradiciones y regiones, cuyas enseñanzas se entrelazaron como hilos en el tejido de mi práctica.
Como mujer, madre y terapeuta, también he atravesado mis propios ciclos y retos: menstruaciones dolorosas, transformaciones profundas, silencios necesarios. Estos desafíos me llevaron a investigar y a profundizar en la salud femenina desde dentro, hasta que encontré en la ginecología ayurvédica (Striroga) un lenguaje que honraba mi experiencia. Me certifiqué como Coach de Salud Femenina en la Academia Europea de Ayurveda (Rosenberg), donde adquirí una comprensión integral de los procesos cíclicos de la mujer y herramientas concretas para acompañarles con presencia y sabiduría.
Hoy, sigo en formación constante, honrando el compromiso de seguir aprendiendo —no sólo desde el estudio, sino también desde la experiencia vivida, los cuerpos que me confían su historia, los ciclos que compartimos.
Mi propósito es ofrecer un espacio íntimo, sensible y profundamente humano, donde puedas reconectar con tu cuerpo, tu ritmo, tu luz interna y recordar que dentro de ti ya habita todo lo que necesitas para sanar.